top of page
DSC_0069.JPG

Ciudad Real

Ciudad Real fue también cuna de muchos mártires. Varios de sus pueblos vieron cómo religiosos eran asesinados por no doblegar su alma. Como en otras tantas provincias de nuestro país, se escapa de la razón humana la cantidad de muertes que fueron consecuencia del odio a la religión. Y como en tantas provincias, no hubo ni un solo caso de apostasía. Esa nuestra tristeza -por las circunstancias en las que se produjeron esas muertes-, pero también nuestro tesoro, por los miles que murieron perdonando y respondiendo a la ira, con Amor. 

DSC_0097.JPG

Vivían en el Monasterio de la Asunción de Calatrava. Era verano y muchos de los estudiantes habían marchado a sus casas. Pero algunos se quedaron en Almagro. Cuando la situación se recrudeció, no huyeron, sino que recibieron con alegría el destino que Dios les había asignado. Murieron al amparo de Su Madre, María, y veinte de ellos alcanzaron la Gloria del Cielo.

bottom of page